viernes, 13 de mayo de 2011

#1: "El viaje con el remisero"

Me molesta tanto cuando los remiseros te “sugieren” tomar otro camino, obviamente para evitar el tráfico, pero mi mente tan rebuscada siempre piensa que es para hacer más kilómetros y cobrarte algo que no estaba en tus planes. Después sí pienso en que voy a llegar tarde al lugar, y que me van a mirar mal, como una irresponsable que no cumple su horario. Soy una persona que me caracterizo por ser puntual y odiar la impuntualidad, debe ser parte de mi NO diagnosticado Trastorno Obsesivo Compulsivo.
Volviendo a la “sugerencia” de mi chofer, afirmo que este tipo de situaciones me estresa, ya que te lo dicen de una manera, con una entonación determinada que me genera ternura (si, un remisero a veces me da ternura), entonces es ahí donde se genera la guerra interna entre mi yo malo y mi yo “buenudo”. El remisero está tan seguro que tomando aquel otro camino vamos a llegar bien que hasta él se lo cree, así que para no tener problemas le digo: bueno, dale, no hay drama (y finalizo con una risita complaciente). Automáticamente me arrepiento, pero me quedo callada, soy ese tipo de gente que reaccionan tarde y después se ponen de mal humor por no haber hecho todo lo contrario. Ya no hay vuelta atrás, no quiero que el remisero me odie y se acuerde de toda mi familia, y además, me cobre una fortuna.
Hoy en día, los viajes en remis no son tan comunes para mi, pero hace un par de meses (cuando estaba trabajando) vivía tomándolos. Pese a mi corta edad y a mi poca experiencia, creo estar sumamente capacitada para dar una descripción de los tipos de remiseros que existen. Me considero una persona muy observadora, que valora y anhela los silencios y prefiere mirar por la ventanilla (a eso lo llamamos “colgarse” y hacer libres asociaciones con la mente, para que el viaje sea mas ameno). Bueno después de una exhaustiva investigación, recopilando datos y pruebas llegue a determinar los siguientes tipos: 
- Remisero Musical: son aquellos que valoran por sobretodo la radio o el CD. La radio puede estar sonando mal, con interferencia, pero el tipo la sigue escuchando, o el CD rayado y no importarle. Querido lector, escuchar Ricardo Montaner en un viaje de una hora y que salte es una experiencia sobrenatural que no debería perderse.
- Remisero Malhumorado: es el que se “mufa” frente a un semáforo, una calle cortada, una manifestación, alguien que cruza mal, o si hace calor, o si hace frío o si llueve o si… bueno, si te pusiste mucho perfume. Hace pequeños ruiditos con su boca, demostrando su enfado contra el mundo, ese tipo de situaciones me hace viajar incómoda, inquieta y a la defensiva. 
- Remisero Fumador: este es el tipo de personaje que odio, hay dos subtipos. El que te pregunta si puede fumarse un puchito, y el que directamente no te pregunta. El primero suele ser mas amable, mas ubicado, pero a la larga le terminas diciendo que fume tranquilo, que no te molesta y que está todo bien, es mas, si hay confianza le podes pedir uno y fumar en compañía. En mi caso, hago sonrisita, me pongo del lado opuesto a él, abro la ventana y listo, de flexible paso a ser tonta, pero ese es un tema que debo tratar en terapia. Y después está el que fuma sin preguntarte, de la nada se prende un cigarro, te larga todo el humo y uno queda perplejo frente a la situación (encima ni te convida).
- Remisero Infractor: este es el caso de los que esconden los cinturones de seguridad. Muchas veces cuando nos sentamos atrás nos olvidados de que los cinturones de seguridad existen, pero si existen o a lo sumo existieron alguna vez en aquel auto, ya que nuestro querido remisero los escondió. Eso me da mucha bronca, ya que uno es dueño de su vida y soy yo quien decido ponérmelo o no, pero que te obliguen a no usarlos eso me altera. Y no solo sucede con los remises, sino también con los taxis. Un amigo se subió a un taxi y el mismo no tenia los cinturones de seguridad correspondientes, por lo cual él decidió bajarse a la cuadra (no tuvo que pagar ni un peso, es buena la excusa para los que no quieren caminar hasta la otra esquina). Creo que esto deberíamos hacer todos, pero bueno, frente al apuro con el que vivimos, a las ganas de no discutir con nadie, nos callamos y seguimos viaje.
- Remisero Latin American Idol: este es de los mas divertidos, pero a la vez me genera ansiedad y ganas de romper todo, porque a veces está bueno que cante bajito el estribillo de algún tema de la radio Aspen, pero cuando ya se sabe toda la canción de David Bisbal me da pánico. Suelo reírme, leer algo, mirar por la ventana, mirar el celular, con tal de evitar esa vergüenza ajena y el mal trago. Por suerte, me tocaron estos especimenes en viajes cortos y no la sufrí tanto. Otra cosa, si es temprano y te ponen Arjona creo que te puede dar un ataque al hígado (con todo el respeto del mundo a los fans de Ricardo Arjona).
- Remisero Charlatán: para mucha gente éste es el copado de los remiseros, pero yo lo odio con toda mi alma, ya que mi personalidad no es de las mejorcitas, soy introvertida, tímida, poco sociable y hasta mal humorada. Entonces, si tienen ganas de charlar conmigo van para atrás. Mis diálogos suelen ser monosílabos, aunque este ultimo tiempo, y frente a la gran cantidad de remiseros charlatanes que me tocaron, no tuve otra opción que hablarles con un poco mas de palabras, y hasta pude llegar a armar una oración. Voy a confesar que muchas veces invento historias, para hacer mas entretenida la cosa. Les invento profesiones, trabajos medios extraños donde estuve, historias de vida irreales y hasta le planteo teorías sobre la teletransportación de personas. Viéndolo de este lado y bajo mis reglas, es divertido viajar con uno de estos choferes, pero siempre hay que ir con una historia pensada, para no improvisar tanto y te tomen de loca, ya que si te pisas quedas mal y te tenes que bancar el viajecito con el tipo cuestionándote todo.
- Remisero Mudo: este es el que te pregunta hasta donde viajas, que camino tomar, pone la radio (a veces  no) y maneja. Te dice buenas tardes (o lo que corresponda) y listo, fin del viaje, a veces uno de esos está bueno encontrar.
(Creo que estas descripciones pueden ser aplicadas a los taxistas, pero en el conurbano donde vivo no los hay, así que me limito a mi queridísimo remisero).
Y bueno, llegamos a destino (media hora más tarde de lo planeado), pero llegamos. Yo estaba de mal humor, enojada con él y no con el trafico, ni con la avenida Pueyrredón que hace solo doble mano para los taxis y colectivos. Pagué, agarré mis cosas (encima tenia abrigo y hacia calor), casi que no lo saludo pero me pareció poco cortés no hacerlo, bajé del auto y di un portazo, chiquito pero lo di. Obviamente me arrepentí mientras cruzaba la calle, pensé en su familia, en su trabajo, en que es humano y que también se puede equivocar, me deprimí y hasta quise volver a pedirle disculpas pero ya se había ido.
Cuando llegué a la vereda de enfrente ahí estaba el lugar, tenía turno a las 14:30 hs, ya eran las 15:04 hs, tenía miedo, era un mundo nuevo, todos eran demasiado amables, di mis datos, me senté en una salita llena de gente y espere a ser llamada.

2 comentarios:

  1. Muy bien, procedo a inaugurar la temporada de comentarios *corta la cintita* *aplausos*.
    A medida que iba leyendo se me iban ocurriendo muchos comentarios, pero mi TOC es más fuerte, así que hago una listita con los principales:
    1) El tema de la puntualidad, más que una obsesión, creo que es responsabilidad.
    2) Detesto al remisero fumador. Yo no fumo y me molesta mucho el olor. Obviamente está pésimo que el remisero lo haga sin siquiera pedir permiso. Pero tampoco debería pedirlo! El remisero no debe fumar dentro del auto. Si tantas ganas tiene, que se pierda un viaje y fume al aire libre.
    3) Me molesta cuando son muy charletas (y ni hablar si me quieren hablar de fútbol, que no entiendo nada). Mis respuestas no pasan nunca de un "jeje", "tremendo", "uy,sí", "así parece", "claro..." y derivados.

    Igual soy re amigable, eh! Sí sí!! :D

    ResponderEliminar
  2. Pero muchas gracias por inaugurar la temporada de comentarios, mas bien diría, por inagurar el blog, pasas a formar parte de la lista vip y tenes dos consumiciones de regalo (?)
    Me encantó tu "tremendo" frente a las no-ganas de charlar. ¿¿Para cuándo un remisero/taxista que te hable de Pomplamoose??

    ResponderEliminar